Javier Fueyo

En el Salón de París del año 2004, Michelin presentó un concepto, pero no era un auto, sino una llanta la cual tenía como particularidad que prescindía de aire y su construcción se asemejaba a las que usan los vehículos que exploran otros planetas.

Estos neumáticos radiales en su parte lateral cuentan con una construcción tipo panal que crea el apoyo necesario que daría una convencional, aunque en este caso sin preocuparse en pinchaduras. Esta llanta tendrá el nombre comercial de TWEEL.

La idea fue concebida por los ingenieros de investigación de Michelin en los Estados Unidos, la TWEEL es una llanta no neumática que revoluciona la configuración de una tradicional, uniéndola con el ensamble del rin en una sola unidad. Está formada por un centro rígido que lo conecta a una estructura de  poliuretano flexible, todo funcionando como una sola  pieza.

A diferencia de las llantas tradicionales, la TWEEL no tiene aire, resolviendo de este modo lo que parecía ser un reto ineludible de pinchaduras de llantas, que asola las actividades de la industria de la construcción, recolección de basura, reciclaje, agrícolas y paisajismo.

Esta nueva plata de producción de 12,500 metros cuadrados en

Piedmont, representa nuestra décima planta de producción en Carolina del Sur y la número 16 en los Estados Unidos. La compañía invertirá cerca de 50 millones de dólares en esta nueva planta.

El primer proyecto de la llantera es equipar toda la gama de tractores para jardín de la marca John Deere y eventualmente comenzar a incursionar en otros mercados, como el de equipo pesado, con productos con dibujos en la banda de rodamiento que se adapten a la superficie de trabajo, por ejemplo tenemos dibujo profundo, tipo llanta convencional y lisa para arena.

Cuando se presentó esta llanta lo hizo en una aplicación para auto, por lo que a mediano plazo podríamos verlas en vehículos citadinos, quedará esperar al desarrollo de la misma para ver si un día un súper deportivo puede montarla.