Enrique González - @600streetka

Este es el motivo por el que este Ford Corcel sea idéntico al popular modelo europeo Renault 12, que  tuvo un gran éxito de ventas en el viejo continente. Como era normal con una Europa arrasada tras la Segunda Guerra Mundial, las automotrices buscaban nuevos mercados para sus productos y varias marcas europeas ponían sus ojos en América Latina, donde ya existía alguna presencia norteamericana.  

En 1966, Renault presentó en el Salón del Automóvil de Francia el nuevo R-12, un vehículo con el que la casa francesa tenía pensado ingresar definitivamente en mercados donde era conocido por sus modelos de bajo costo y que logró con gran éxito en lugares como Argentina y Colombia, donde las negociaciones fueron exitosas, y el modelo fue lanzado al mercado con un gran éxito de ventas.

En el caso de Brasil, Renault también inició las trámites para su producción con la Willys Overland do Brasil, representante oficial de Renault en aquel país, sin embargo, a mitad de las negociaciones, esta empresa quebró y su control fue asumido por la Ford Motor Company, que de esa manera iniciaba su posicionamiento en el mercado brasileño. 

Tras esta quiebra las cosas cambiaron, ya que Ford mantenía un respeto por imagen y calidad de sus productos muy diferentes a las de la ya decadente Willys Overland. Esto no hizo que Ford viese en este proyecto una excelente posibilidad de completar su gama en Brasil, compuesta por las camionetas de la Serie F y el mayor y más caro Galaxie, y continuó fuerte en las negociaciones con Renault. El resultado de estas duras negociaciones sería bautizar el auto como Ford Corcel, un modelo que contó con una buena campaña publicitaria en Brasil en la que Ford mostraba a un Ford Mustang corriendo a la par de un Mercury Cougar, y a un Ford Corcel que los rebasaba sin problemas.

Esta campaña hizo que los brasileños conocieran a este Corcel como "O Cavalo Brasileiro" (el Caballo Brasileño). En 1969 Ford remarcó la agresiva campaña de este modelo presentando la versión coupé del Corcel, la cual fue todo un suceso en ventas en Brasil. Con este auto, Ford no solo rompía el anémico molde del R12, sino que ofrecía a su clientela un auto con estilo deportivo. El diseño de este coupé, configuraba lo esencial del Corcel, con el estilo de los deportivos netamente americanos, lo que le catapultó en las ventas.  El Ford Corcel tendría una segunda generación, que le consiguió mantenerse en producción hasta 1986.