Rodrigo Buendia

El escándalo de emisiones del Grupo Volkswagen creció después de que la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés) dijera que el fabricante admitió que sus vehículos diesel de 3.0 litros de los pasados 7 años han violado los estándares de emisiones.

El Grupo Volkswagen aceptó durante una junta que las violaciones de emisiones que la EPA había notificado son mucho más graves.

Ahora se incluyen todos los vehículos Volkswagen y Audi con el motor 3.0 litros diesel de 2009 a 2016. Eso suma 85 mil vehículos tan solo en Estados Unidos.

Dave Clegern, vocero de la California Air Resources Board, que investigó a Volkswagen junto con la EPA, dijo que la marca alemana admitió instalar “dispositivos alternos de control de emisiones” en los vehículos.

Eso es una violación a las leyes de control de calidad en el aire, dijo. Las agencias también están probando vehículos para determinar si el equipamiento extra califica como “trampa”.

Brad Stertz, un vocero de Audi, dijo que la compañía admitió no haber notificado a la EPA acerca de este equipamiento extra de control de emisiones, pero no declaró si este califica como trampa o no.

“Acordamos tomar todos los motores de 3.0 litros, recalibrar el software y dárselos de nuevo a la EPA para que los evalúe”, dijo Stertz.

Dijo que se requerirá una inversión estimada de miles de millones de dólares.

La EPA ya había acusado a Volkswagen de instalar el software maligno en cerca de 10 mil vehículos con el motor diesel de 3.0 litros modelos 2014 a 2016. Estos modelos incluyen la Volkswagen Touareg, Audi A6, A7, A8 y Q5 de 2015 y 2016. También involucró a la Porsche Cayene 2014 a 2016. Con esta nueva acusación se incluye a la lista la Audi Q7 de 2009 a 2012.